Este bellezón se llama Nish (Nishma, estrella en árabe), como estrella que es. Seguramente sus dueños anteriores no supieron apreciar a esta belleza y por eso la dejaron atada en la puerta de una protectora y muy mal atada puesto que estuvo vagando por la carretera con el peligro de que la atropellaran. Por suerte, su ángel apareció y la recogió.
Aún nos sorprendemos al ver que estos hechos suceden y se sigue ignorando la problemática actual de cría descontrolada. Estos hechos suceden para todos los animales, sean de raza cotizada o de raza común.
Gracias Ruth por rescatar a esta estrella.
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